
Nuestras válvulas antirretorno o charnelas de polipropileno son la solución perfecta para prevenir olores y plagas, permitiendo el paso del agua en la dirección deseada. Diseñadas a medida, son resistentes a químicos, ácidos, aguas negras y ambientes salinos, además de ser livianas y fáciles de transportar.
Con una vida útil de más de 10 años sin mantenimiento correctivo, su instalación en superficies planas garantiza un rendimiento óptimo. Gracias a su fabricación sin materiales metálicos, son seguras frente al vandalismo y el robo.
La charnela o válvula antiretorno en plástico para redes de alcantarillado se pueden fabricar en color que determine nuestro cliente de acuerdo a la norma y se pueden marcar en bajo relieve con indicaciones de seguridad o con el logo de la empresa.